Está claro que la pandemia del coronavirus ha llegado (casi) sin avisar. Y que sus consecuencias económicas son ya más que notorias en la sociedad. De hecho, se espera que estas continúen, aunque con diferente intensidad, durante 2021. Y tú, ¿necesitas cobrar ese dinero que prestaste y que hoy más que nunca podría suponer un balón de oxígeno para tu economía?