¡Alerta! Se ha producido el primer impagado por parte de un cliente. ¿Cuál es el procedimiento que debemos seguir? En la investigación está la clave antes de reclamar el pago de la deuda recién contraída. Te contamos qué pautas para investigar impagados debes seguir.
El impago de una factura -dependiendo de su importe- no tiene porqué ser soportada por ninguna empresa. Se ha dado un servicio o se ha servido un producto y por tanto debemos cobrar dicha o dichas facturas. ¿Qué debemos hacer antes de reclamarla? Recurrir a un servicio de impagado como el que te ofrece Grupo Intercobros te ayudará ya no solo a cobrar dicha deuda sino a arrogar luz de la situación real del cliente con el que estás tratando. Y es que, por muchos años que puede que tengáis de relación comercial nunca puedes prever acontecimientos como estos. Por ello nada mejor que tengas en cuenta estas pautas para investigar impagos. Una serie de recomendaciones concretas que te ayudarán a estar más tranquilo, por un lado, y por otra parte, a saber cómo actuar, qué hacer y qué decisiones tomar.
- Es necesario que conozcas si el impago es fruto de la una falta de liquidez transitoria por parte del cliente o es debido a una mala gestión administrativa. Algo importante cara a actuar de una manera u otra.
- Contempla la necesidad de disponer de informes comerciales acerca del cliente en cuestión para conocer más sobre su realidad económica.
- Ten en cuenta que aunque el cliente cancele el impago y pague su deuda, debes seguirle la pista. O lo que es lo mismo, analizar y realizar un seguimiento exhaustivo de sus pagos futuros.
- Ante cualquier incidencia de cobro, sé amable y cauto. Sé, en definitiva, profesional e interésate de porqué ha ocurrido. No lo pases por alto porque quizás él también pase por alto pagarte…
- Como es normal, si el cliente se retrasa en los pagos de forma recurrente, es un síntoma inequívoco que su situación financiera está en crisis. Debes conocer en la medida de la posible cuál es su situación y si está realizando impagos a otros acreedores.
- Recuerda una máxima en el recobro de impagados: si un cliente te pide un mayor aplazamiento de sus plazos de pago de forma provisional, éstos suelen convertirse en definitivas. ¡Ten mucho cuidado! Por lo tanto, no es conveniente otorgar mayores plazos a un cliente con carácter provisional.
- Puedes presagiar una futura insolvencia cuando los deudores te solicitan aplazamientos en los pagos ya que éstos suelen ser debidos a serios problemas de liquidez y a la falta de financiación.
- Revisa el riesgo disponible del cliente. Puedes averiguar (en la medida de lo posible) si sus cuentas dependen de una cartera pequeña de clientes o trabaja en un sector de riesgo.
- Si la empresa que te debe esos impagos cambia de repente de actividad social o incorpora nuevas actividades en el objeto social es que algo está fallando… Tampoco los cambios de ubicación no son buena señal ni los cambios en la gerencia o de propietarios. La reducción de plantillas es otro sistema de alerta.
- Otra pauta para investigar las causas reales de un impago es observar que de pronto se encuentran esquivos, y que aunque contestan a los emails y llamadas, el contacto con éstos se ha convertido en tarea harto complicada.